¿Qué es el periodo alfarero?
¿Qué es el periodo alfarero?
El período agroalfarero temprano es un período arqueológico usado para la clasificación de culturas arqueológicas de los pueblos originarios del noroeste argentino y norte y centro de Chile. Se desarrolla entre el 500 a. C. y el año 650 de nuestra era.
¿Qué es la sociedad Agroalfarera?
Se caracteriza por el manejo de los recursos naturales, la producción de plantas y animales domésticos, el manejo del agua con sistema de almacenamiento para los excedentes de producción económicos; en lo social hay un sistema de creencias que ritualizan y división del tiempo.
¿Qué representa la cultura Valdivia?
La cultura precolombina Valdivia es una de más antiguas del continente americano y da el inicio de la tecnología de alfarería en el Ecuador y en el «Nuevo Mundo», hace unos 5.500 años, (3.500 a.C.)., fueron un pueblo sedentario. Disponían de una fuente alimentaría segura como fue la agricultura.
¿Cuál es la figura más representativa de la cultura Valdivia?
La «Venus de Valdivia» constituye una de las expresiones más representativas de esta cultura, considerada como una de las más antiguas del Ecuador.
¿Cuáles son las características de una figurilla de la cultura Valdivia?
– Una de las características más notables en la cerámica de la cultura Valdivia es la aparición de figurillas en su mayoría pertenecientes al sexo femenino, las mismas que mundialmente han sido conocidas como “Las Venus de Valdivia”, y en las cuales se puede visualizar la región púbica.
¿Qué actividades más importantes realizaban los habitantes de la cultura Valdivia?
Recolectaban frutos silvestres como papayas, piñas, chirimoyas y paltas, cazaban venados, pescaban y recolectaban mariscos. La cultura Valdivia dio paso, en la misma región, a la cultura Machalilla. Transmitiendo a esta muchos elementos culturales, especialmente aquellos relacionados con la innovación en la cerámica.
¿Cuáles son las costumbres de la cultura Valdivia?
Entre otras costumbres funerarias, los miembros de esta cultura realizaban los enterramientos en los mismos montículos en los que construían sus viviendas. Los niños, en ocasiones, eran enterrados en vasijas de cerámica, mientras que los perros domésticos se enterraban de una manera parecida a la de sus dueños.